La mediación privada brinda soluciones a conflictos de arrendamiento al proporcionar un espacio neutral y confidencial donde las partes pueden discutir sus diferencias y buscar soluciones mutuamente aceptables. Donde un mediador puede ayudar a las partes a identificar los intereses subyacentes de cada una, desarrollar opciones para resolver el conflicto y negociar un acuerdo que sea satisfactorio para todos los involucrados. La mediación privada es una opción viable para los conflictos de arrendamiento que no pueden resolverse por sí mismos y es particularmente útil en los casos en que las partes tienen una relación continua o que desean mantener una relación comercial en el futuro.